CALIBRE POLÍTICO… COLUMNA
PELAN. – Maru Campos rompió el protocolo y sorprendió a propios y extraños durante su entrevista con Víctor Trujillo, mejor conocido como el payaso Brozo. Y es que el polémico personaje la llevó a sus terrenos del albur y el lenguaje florido hasta que la hizo responder, en clara referencia tanto a Javier Corral como a Gustavo Madero, que se la seguirán peleando -así lo dijo- ya que no lograron ni encarcelarla, ni tubarle su candidatura ni impedir que ganara la gubernatura.
PERSIGNADOS. – Como el caso es encontrarle defectos -que seguro los tiene-, el uso de esas palabras que todos decimos en público y en privado, no le resta ni un ápice a la gobernadora, ni por su condición de mujer en una sociedad machista que sigue creyendo que ellas deben cuidar más su porte y su lenguaje que el hombre. ¿Por qué festejarle al Bronco, exmandatario de Nuevo León, o a Vicente Fox, expresidente de México, sus majaderías, y crucificar a Maru por no cuidar la investidura? Es pregunta.
CHELA I. – A la que le cortaron de tajo sus aspiraciones para ocupar la Secretaría General del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, fue a Graciela Ortiz, quien ya había presumido entre sus cercanos que una vez que Carolina Viggiano renunciara al cargo para emprender la búsqueda de la candidatura a la gubernatura de su natal Hidalgo, ella subiría en automático a la segunda posición más importante del partido a nivel nacional, pero por cantarlas tiernitas, todo se cae de un momento a otro.
CHELA II. – Nos dicen los que tienen contactos en la Ciudad de México, que a Chela le avisaron prácticamente a la hora de anunciar los nuevos cargos que le habían inventado una nueva Secretaría para ella, la de Estrategia y Planeación, misma que, aunque tiene su oficina enseguida de la de Alito Moreno, en la realidad queda más distante del dirigente nacional que lo que estaba y eso, aunque sus aplaudidores no lo quieran ver, le merma su poder. De por sí son cada vez menos los que la mantienen en un pedestal.
BOICOT. – El presidente del Comité Directivo Municipal del PRI en Parral, ya no se conforma con maltratar a los secretarios de su propia cartera, ahora también se le atravesó a Edgar Piñón e intentó boicotearle una reunión con presidentas seccionales que se realizó ¡en el mismo partido!
CONVOCATORIA. – Resulta que el diputado local citó a las lideresas territoriales en el auditorio del PRI el pasado viernes, con el objetivo de exponerles lo que está haciendo en el Congreso del Estado y en sí, establecer un acercamiento con ellas tras las quejas de algunas sobre el distanciamiento que sintieron después de que asumió como legislador. La convocatoria era para un centenar de seccionales, hecha a través de la Secretaría de Organización del partido.
ÁLVAREZ. – De las 100 presidentas que esperaba Piñón, llegaron unas 60, aproximadamente, ya que Rafael Álvarez, molesto porque aunque la invitación sí se hizo por medio del partido, no fue directamente a través de él, intentó boicotearle el evento a Edgar Piñón pidiéndoles a las invitadas que no asistieran, debido a que no era una reunión “oficial”. Pero, rajado como dicen que es el dirigente priista y para tener a quien echarle la culpa, como acostumbra, él no se ensució las manos y utilizó a dos personajes que se pintan solos para hacer el trabajo sucio.
RECLAMO. – A punto de comenzar la reunión de ese viernes, el diputado se enteró de la jugarreta de Álvarez Botello y no se detuvo en hacerle un fuerte reclamo, mismo que descaradamente justificó el presidente del partido alegando que ese tipo de convocatorias las deben hacer exclusivamente él o la secretaria general, es decir, Dalila Villalobos, instrucción que no le pareció nadita a Piñón Domínguez y se enfrascaron en dimes y diretes.
FRUSTRACIÓN. – Nos cuentan que Rafael Álvarez sufre de un exacerbado culto a la personalidad que no le permite hacer equipo ni siquiera con los suyos ni con los que le apoyaron a llegar a la dirigencia local, ni con los que él mismo invitó a formar parte de la cartera del Comité y ahora con la única persona que ganó una posición en las pasadas elecciones, pues quiere aparecer en todas, pero como diría Artemio Iglesias: “no le da”, en referencia a que no le alcanza el liderazgo y eso le causa una frustración que lo hace cometer un tropezón tras otro.
DESCONTENTO. – Con otra: nos enteramos que durante la reunión de líderes de sectores y organizaciones con Alejandro Domínguez, presidente estatal del PRI, los ahí presentes le manifestaron a Alex su descontento por el actuar de Álvarez, ya que no les baja las instrucciones o estrategias a seguir por los canales adecuados, es decir, a través de los coordinadores de zona y secretarios de organización y eso genera falta de comunicación y, por ende, de coordinación, situación de la que no estaba enterado Domínguez.
COBARDÍA. – Más allá, en un acto de total cobardía, en lugar de asumir su responsabilidad, Álvarez Botello le echó la culpa a Roberto Urbina y a Óscar Lozoya, ¡sus propios secretarios de organización!, demostrando así que él no tiene el control de nada en el partido tricolor. Pero lo más lamentable, es que permitió que hablará por él un multiusos que ostenta todos los cargos habidos y por haber en el PRI, pues es al mismo tiempo dirigente de Movimiento Territorial, delegado de los jóvenes y hasta representante de Graciela Ortiz en el municipio, de quien se disputa el cariño con Memo Ramírez Junior.
EXPULSIÓN. – Dicen que este personaje “todas-mías” pidió -a nombre de Álvarez y delante de él- la cabeza de Urbina y de Lozoya por haber sido los responsables de la convocatoria a la taquiza para celebrar aquel cumpleaños de la discordia de Pedro Villalobos que no terminan de superar. Para ese momento, Alex Domínguez los paró en seco y le cuestionó a Rafael si ya había sostenido un acercamiento o una reprimenda verbal con los aludidos, a lo que el abogado respondió que no. Fue entonces cuando el presidente del CDE les indicó que el objetivo era unir, no dividir. ¿Así o más penosa la actuación?
AGARRÓN. – Pero si no bastara con las vergüenzas de Álvarez Botello, hubo otro agarrón del que fueron testigos varios priistas y que protagonizaron Avril Carmona y Dalila Villalobos derivado de que la regidora le reclamó a la asesora de Piñón lo mismo que Rafael al diputado: no tomarlos en cuenta para las reuniones con presidentas seccionales. Pero como la exsíndica no es la monita de los cerillos -y lo demostró con los manotazos que daba-, enfrentó a la también secretaria general del partido y nomás se oían los gritos, dicen los que las vieron.
AVRIL. – Por cierto que los más enterados nos aseguran que Edgar Piñón y Pedro Villalobos lograron ponerse de acuerdo para proponer que sea Avril Carmona quien sustituya a Rafael Álvarez en la Presidencia del Directivo Municipal del PRI, con quien ambos la llevan bien. Quiensabe cuáles hayan sido las negociaciones, porque de que Pedro volverá a buscar la candidatura a la alcaldía, de eso no hay duda, así que por ahí puede ir la promesa.
DALILA. – Para no dejar nada en el tintero tricolor y regresando a la reunión de Edgar Piñón con las presidentas seccionales, cuando terminaron de discutir el diputado y el presidente del PRI, bajaron los dos a convivir con los militantes ahí reunidos y más tarde llegó Dalila Villalobos, a quien Álvarez le pidió al micrófono hacer uso del mismo para emitir un mensaje a los ahí reunidos, pero la regidora se negó delante de todos y no hubo poder humano que la hiciera cambiar de parecer, lo que provocó cuchicheos negativos en su contra. Así las cosas en un partido del que se disputan sus despojos como aves carroñeras.
POLICÍAS. – Los agentes municipales que fueron suspendidos de sus labores durante la pasada administración y que todavía no logran resolver su situación jurídica y laboral, buscan ayuda con Amín Corral en la oficina local de Derechos Humanos, desesperados por la incertidumbre en la que viven, esperanzados a que la nueva administración de César Peña los recontrate, lo que se antoja difícil, al menos de forma voluntaria, sino por mandato legal.
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