CALIBRE POLÍTICO… COLUMNA

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ATAÚD. – Los clavos para sellar el ataúd del PRI en Parral son puestos por los mismos priistas, incapaces de ponerse de acuerdo y dejar de destrozarse entre ellos mismos, ante una dirigencia sin liderazgo, que prefiere la exclusión a la inclusión y lo peor de todo, que no entiende que no entiende.

INSOSTENIBLE. – Rafael Álvarez alcanzó el clímax de una situación que es ya insostenible, sin tomamos en cuenta que solo le falta pelearse con el espejo. Basta recordar que desconoció a tres de sus secretarios, el de comunicación y luego los dos de organización; luego boicoteó al diputado local y ahora, gracias a su política de exclusión, ahuyentó a dos los tres regidores que ganaron en Cabildo.

REGIDORES. – La decisión de separarse del partido por parte de Cristina Molina y José Ángel Rivera se tomó el pasado 6 de octubre en la mesa de un restaurante local entre 9 y 10 de la mañana, mientras compartían el pan y la sal Miguel Jurado Prieto, su familia y las “leonas” más cercanas, junto a los joy regidores independientes. Pero Álvarez Botello les regaló el argumento perfecto con la gira de Alejandro Domínguez por Parral, a la que no los invitó. Ya se iban solitos, él cargó con la culpa.

EXCLUSIÓN. – El presidente del Comité Directivo Municipal, en lugar de emitir un posicionamiento conciliador que invite a la unidad, reconociendo el derecho de Cristy y del Pinocho a disentir, expresándoles que las puertas quedaban abiertas, en fin, palabras que acolchonen la vergonzosa partida de los ediles, optó por la descalificación, tachándolos de novatos, egoístas, irresponsables y unas cuantas cosas más, demostrando por qué no debe seguir al frente del PRI.

OPOSICIÓN. – Ya de salida, las formas importan poco, por eso el Pinocho Rivera ventiló que la línea que pretendían imponerles en el Revolucionario Institucional era la de oponerse a todo lo que propusiera César Peña y alegaron no estar de acuerdo en conducirse de esa manera, sino ser oposición responsable, lo que significa lisa y llanamente que aprobarán algunas iniciativas, según les convenga, porque saben que sus dos votos ahora valen más que cuando eran regidores priistas.

COORDINACIÓN. – Recién nombrada coordinadora, Dalila Villalobos se quedó sola, aunque de igual forma, de haber permanecido en la bancada, tampoco podría coordinarlos porque no le harían caso. Sin embargo, no es tan malo como parece y ya lo habíamos dicho: si se pone lista, esta es una oportunidad única para que brille y para impulsar su carrera política, siempre y cuando no adopte el modelo de Tere Arteaga de oponerse a todo, sino perderá credibilidad.

LÍNEA. – Aunque lo negaron, Molina y Rivera hicieron buenos los pronósticos de esta columna sobre su superación del PRI y tampoco pudieron ocultar que traen línea de Jurado Prieto, a quien aceptaron haber consultado antes de dar el paso. Los dos regidores durarán un buen tiempo sin partido -creemos que unos dos años-, hasta que sepan si Miguel va de la mano de Cruz o de Maru, entonces engrosarán las filas del PAN o de Morena. Anote el dato en algún post-it y guardelo donde no se pierda.

CISMA. – El cisma por el que atraviesa el PRI no parará aquí. Rafael Álvarez continuará con la encomienda de Alex Domínguez para borrar consejeros de un plumazo acomodar a los que necesitan para mantener la franquicia, mediante la técnica de la desunión, generando confusión y desánimo en la militancia; así es más fácil meterse por la brecha y conseguir el objetivo de que Alejandro se mantenga en el CDE para luego usarlo como tienda de intercambio.

Aceptamos sus comentarios, felicitaciones, quejas, sugerencias y aportaciones que afortunadamente son muy nutridas en el correo electrónico: codigo13parral@gmail.com no dude que sus mensajes fortalecen este espacio de crítica pública y objetiva.