2017 cerró con una inflación de 6.77%; BANXICO ya tomó medidas: Expertos
El año pasado cerró con una inflación de 6.77%, la más alta en los últimos 17 años de acuerdo con datos del Inegi.
En el último año del sexenio de Ernesto Zedillo, el indicador llegó a 8.96% y en 2016 cerró con 3.36%, la mitad de la tasa anual registrada en 2017.
Las cifras oficiales señalan que la inflación general del pasado diciembre fue de 0.59% debido al incremento del jitomate, las tarifas aéreas y los servicios turísticos en el marco del asueto navideño.
El índice de precios de la canasta básica tuvo un incremento de 0.66% en el último mes de 2017, para una tasa anual de 9.61%. En el mismo mes de 2016 estas cifras fueron de 0.41 % mensual y de 2.82% anual.
Carlos Capistrán, economista en jefe para México y Canadá de Bank of America Merrill Lynch, advirtió que el resultado del indicador puede generar expectativas de altos precios y presionar negociaciones salariales al alza, lo que generaría más inflación.
Sin embargo, aseguró que el Banco de México aplicó la medicina adecuada al anticiparse con el alza de tasas, por lo que ahora sólo falta esperar la baja de precios.
INFLACIÓN, LA MÁS ALTA DESDE EL 2000
La inflación de 2017 se ubicó en 6.77%, la más alta en los últimos 17 años. Indicadores del Inegi mostraron que la inflación general de diciembre resultó en 0.59 por ciento, impactada por el incremento en el precio del jitomate así como en las tarifas aéreas y los servicios turísticos dado el periodo vacacional de Navidad y Año Nuevo.
El Instituto detalló que el índice de precios subyacente reportó un incremento mensual de 0.42% y una tasa anual de 4.87%; en tanto que el índice de precios no subyacente aumentó 1.09% mensual, alcanzando de este modo una variación anual de 12.62 por ciento.
Por su parte, el índice de precios de la canasta básica tuvo un incremento de 0.66% en el último mes de 2017, obteniendo de este modo una tasa anual de 9.61%. En el mismo mes de 2016 las cifras correspondientes fueron de 0.41 % mensual y de 2.82% anual.
Carlos Capistrán, economista en jefe para México y Canadá de Bank of America Merrill Lynch, advirtió que este resultado puede generar expectativas de altos precios y, presionar negociaciones salariales al alza, lo que a la postre generaría más inflación, sin embargo, dijo que lo bueno es que el Banco de México ya está aplicando la medicina adecuada debido a que se anticipó con el alza de tasas y ahora sólo falta esperar la baja de precios. “En un comparativo internacional, México tiene las tasas reales más altas del mundo y esto es la medicina para combatir la inflación, aunque el alto costo del dinero está teniendo un efecto negativo sobre la actividad económica”.
Añadió que el gobierno también está haciendo lo que puede ya que tiene “poquito” espacio fiscal para ayudar a los consumidores con el precio de las gasolinas.
Economistas de Banorte expusieron que el resultado de precios confirma su perspectiva sobre un banco central con sesgo hawkish en sus siguientes comunicaciones sugiriendo otra alza en tasas el 8 de febrero, y dos más durante el primer semestre del año.
Expertos de Invex, por su parte, afirmaron que “la aceleración de la inflación respondió al incremento generalizado en los rubros volátiles de energéticos y agropecuarios, así como el efecto de traspaso de la depreciación del peso sobre los precios subyacentes”.
En el rubro subyacente, los servicios aumentaron 0.50%, debido al incremento en el transporte aéreo y servicios turísticos, mientras que las mercancías reportaron un avance de 0.32 por ciento.
Los precios de gasolinas y gas LP aumentaron en línea con los referenciales internacionales y su liberalización supone un riesgo al alza para inflación de este año”.
Pero aclararon que la disipación de algunas presiones favorecerá su desaceleración. “Esperamos que se ubique en niveles de 5.58% en enero y que se modere lentamente durante el resto del año para que cierre en 4.5 por ciento”.
Con información de: sinembargo.com