La prostitución en la red; Viejo oficio, nuevo giro: INSPECTOR
Debido a que no existen leyes o reglamentos que regulen la prostitución a través de la red, este fenómeno está creciendo a pasos agigantados, dijo el inspector de gobernación en el municipio licenciado José Carlos Esparza.
Sin embargo, aclaró que como municipio no se puede hacer nada, hasta en tanto, no sea emitido un reglamento que controle esta situación, por lo que ellos solo se encargan de aquellas personas que están bajo el registro dentro de la oficina, mismo en donde se tiene un control diario, semanal, mensual y anual esto para evitar un problema de salud pública.
Manifestó que el tema de la prostitución en las redes sociales tiene que regularse, esto debido a que por cada persona que está registrada en el padrón municipal, hay 3 que no lo están y esto es un problema.
El funcionario municipal destacó que es difícil encontrar experiencias cotidianas –o no tan cotidianas– que no hayan sido transformadas por el Internet y este rubro que ha tenido una metamorfosis similar es la prostitución.
“Independientemente de si es legal o penalizada en cualquier país, la llamada “profesión más antigua del mundo” encontró a su pareja perfecta en la red”, aseguró el entrevistado, quien preciso que las trabajadoras sexuales tienen más control, pueden elegir a sus clientes con más cuidado y éstos pueden obtener referencias sobre la persona a la que quieren contratar”.
Refirió que la posibilidad de ofrecer servicios sexuales a través de Internet ha ayudado a la proliferación de la prostitución, que se discute y promociona de forma más abierta que nunca, aunque para muchos no está tan a la vista.
En lugar de adentrarse en las profundidades de la web, las trabajadoras sexuales crean páginas de Internet convencionales en servidores extranjeros, o incluso limitan su actividad a redes sociales como Facebook o Twitter, argumenta el entrevistado.
Algunos de ellos, añade, atraen y conservan clientes actualizando sus perfiles con imágenes provocativas, anuncian su disponibilidad para fechas específicas, y crean hashtags donde ofrecen sus servicios.
Los sitios que promocionan a los servidores incluyen sus datos físicos –como medidas, color de piel, tipo de cuerpo–, sus servicios, precios y talentos especiales, así como la opinión de personas que han recurrido a ellos.
Y cuando estos crean un perfil en una plataforma que tiene a varios trabajadores sexuales, los consumidores tienen la posibilidad de realizar búsquedas específicas con esos datos.
Sin embargo, aclara y reitera, “poco o nada se puede hacer en este sentido toda vez que no existe un reglamento o ley que controle dicha situación la cual, sabemos, está creciendo a pasos agigantados”, concluyó.