Destaca cultura ralámuli en Museo de Historia Natural de Nueva York
El Museo Americano de Historia Natural (AMNH, por sus siglas en inglés), ubicado en la ciudad de Nueva York, E.U., presentó la primera parte del proyecto “Casa caminante de saberes ralámuli”,
Lo anterior a través de una conferencia virtual transmitida en vivo en su página de Facebook en donde los integrantes de la comunidad ralámuli, María Luisa Chacarito y Adolfo Fierro, junto con la etnóloga Sabina Aguilera, el agroecólogo Fernando García Dory, así como la curadora Sofía Mariscal, hablaron sobre los aspectos fundamentales de uno de los pueblos originarios del estado de Chihuahua, destacando la difícil situación que se vive actualmente debido al desplazamiento y la pérdida de tradiciones, así como el papel del pensamiento creativo y el empoderamiento comunitario en las luchas por el territorio.
Participó además la archivista del museo Barbara Mathe, quien ahondó sobre la historia y primeros registros antropológicos culturales a través de la colección fotográfica del etnógrafo Carl Lumholtz, la cual es custodiada por el AMNH.
“Casa caminante de saberes ralámuli” es un proyecto financiado por el Eká Nawéame Programa de Estímulos Fiscales para la Cultura y las Artes de Chihuahua, a través de Distribuidora de Aceros Laminados S.A. de C.V. (DALSA) como empresa aportante, y bajo la responsabilidad de Sofía Mariscal.
Se trata de un trabajo colaborativo con la curaduría de Sofía Mariscal, directora de Fundación Marso; Sabina Aguilera, etnógrafa experta en la iconografía y uso del textil ralámuli; y Fernando García Dory, artista y agroecólogo de origen español impulsor del proyecto Campo Adentro.
La iniciativa consiste en una serie de talleres y el estudio de la cultura ralámuli, con la que se rescatan aspectos como leyendas y tradiciones orales, técnicas ecológicas para obtener la materia prima de sus productos artesanales, así como la transmisión de estos saberes a nuevas generaciones.
Durante su intervención, la artesana ralámuli María Luisa Chacarito, habló sobre su trabajo de confección de cobijas de lana y de cómo esta tradición le fue transmitida de sus antepasados, además mencionó su preocupación acerca de que sus costumbres y saberes sean respetados y preservados.
Por su parte, Adolfo Fierro, comprometido promotor de su cultura entre las comunidades más jóvenes, manifestó su deseo de que se documente más acerca de su idioma, ya que percibe con inquietud que muchas de sus palabras se están perdiendo debido al desplazamiento y urbanización.