Sequía sin precedentes anticipa una inminente crisis alimentaria para 2024
Agricultores y expertos alertan sobre los devastadores efectos de una sequía atípica y temperaturas extremas en la producción de alimentos
MESA DE REDACCIÓN:
Los productores agrícolas están alarmados por la situación actual, ya que anticipan una crisis alimentaria en 2024 debido a una inusual y severa sequía. Eraclio Rodríguez Gómez, un experimentado agricultor del municipio de Namiquipa, expresó su preocupación y destacó que a lo largo de sus 60 años de experiencia nunca había presenciado una sequía tan intensa y atípica como la actual. Esta sequía se ve agravada por temperaturas extremadamente altas que están generando un estrés significativo en las plantas y los animales. Rodríguez Gómez enfatizó que esta situación representa una seria amenaza para la seguridad alimentaria.
La falta de lluvia y las condiciones climáticas adversas tendrán un impacto significativo en la producción de alimentos, lo que resultará en un aumento de los precios. Actualmente, ya se han registrado aumentos en los precios de alimentos, como el frijol, que ha alcanzado los 58 pesos por kilogramo en algunas centrales de abastos. Sin embargo, Rodríguez Gómez predice que la crisis alimentaria estallará en marzo, coincidiendo con el proceso electoral. Este escenario afectará a todos los partidos políticos, ya que ninguno ha mostrado un interés genuino en apoyar y rescatar al sector agrícola mexicano, que es fundamental para el suministro de alimentos del país.
El agricultor señaló que la situación será especialmente preocupante para la producción de tortillas, ya que el ciclo de siembra de otoño-invierno en Sinaloa está por cerrarse, y los productores no han sembrado mucho debido a la escasez de agua en las presas. Nadie está dispuesto a arriesgarse a sembrar sin garantías de agua, lo que significa que no habrá cosecha entre febrero y abril.
Rodríguez Gómez también destacó que los apoyos gubernamentales, como los 4,000 pesos mensuales que se otorgan a través de programas como Bienestar, no serán suficientes para que las familias compren alimentos, ya que la inflación erosionará su poder adquisitivo. En última instancia, teme que el dinero destinado al campo termine beneficiando a la iniciativa privada, incluyendo importadores de alimentos como El Alazán, así como empresas como Maseca y Minsa, que producen tortillas.
El productor lamenta la falta de un presupuesto adecuado para el sector agrícola y la asignación de recursos a programas emblemáticos del gobierno federal, como Sembrando Vida, fertilizantes y Produciendo para el Bienestar, que se centran en la agricultura social en lugar de abordar la crisis alimentaria inminente.