Huyeron militares tras asesinatos
Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), asignados al patrullaje de la zona fronteriza entre México y Estados Unidos, dispararon contra presuntos traficantes de personas y personas en situación de movilidad que pretendían ingresar a ese país por la zona desértica del estado de Nuevo México, informó la Fiscalía General del Estado (FGE).
Luego de los hechos, personal militar abandonó a las personas lesionadas sin prestarles auxilio y recogieron los casquillos percutidos en un intento por ocultar los hechos, según los testimonios de los sobrevivientes al ataque, que, desde su ingreso al Hospital General, acusaron a los soldados de dispararles.
El saldo fue de dos personas muertas y cuatro lesionadas por proyectil de arma de fuego, además cuatro mujeres huyeron con el traficante de personas que los pretendía cruzar por el muro fronterizo, y para ello utilizarían una escalera metálica, informó en conferencia de prensa el fiscal de Distrito Norte, Carlos Manuel Salas.
Las víctimas mortales son: Elvis Enrique Barrientos de la Rosa, de 27 años; y Margarito Canto Juárez, de 45 años, ambos de nacionalidad guatemalteca. Mientras que los lesionados fueron identificados como Carlos Humberto R.L., de 19 años, Selvin Eduardo G. P., de 19 años, y Rigoberto G.Ch. de 28, quienes también son originarios de Guatemala, así como Raúl de Jesús H. R., de 18 años y de nacionalidad hondureña.
El personal castrense, como coadyuvante del Ministerio Público (MP), estaba obligado brindar los primeros auxilios a las víctimas, reportar los hechos ante la autoridad competente y a acordonar la escena del crimen hasta que llegaran peritos y agentes del MP, lo que no ocurrió.
En el lugar de los hechos, los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE) aseguraron que cuando llegaron a una de las brechas contiguas al muro fronterizo observaron a los militares y pese a que trataron de hablar con ellos, la unidad se retiró sin proporcionarles información, y entonces ellos fueron los encargados de brindar la asistencia a los heridos y acordonar la escena del crimen.
No se pararon: fiscal
Aunque existen lagunas en cuanto a la manera cómo ocurrieron los hechos, el fiscal Salas dijo que el lunes aproximadamente a las 18:00 horas un grupo de extranjeros viajaba dentro de una camioneta Ford Expedition y se dirigían a la frontera con la finalidad de brincar el muro, para lo cual portaban una escalera. El chofer y cuatro mujeres se retiraron del lugar.
Al parecer se encontraron con elementos del Ejército y trataron de huir los “polleros”.
“No se pararon, vinieron disparos. No hemos encontrado casquillos porque el lugar donde se dieron los hechos es diferente al lugar donde se atascó la camioneta, no sabemos cuántos kilómetros avanzó la camioneta y se están haciendo rastreos en la búsqueda de casquillos”, agregó.
Una de las interrogantes que surgió fue quién dio aviso de los hechos. El fiscal Salas refirió que, dentro de la camioneta Expedition quedó uno de los cuerpos y otro muy cerca del vehículo, también viajaban cuatro mujeres extranjeras, las cuales se retiraron junto con el chofer, uno de los probables involucrados en el tráfico de personas. La FGE investiga al propietario del vehículo asegurado y remolcado a los patios de la Fiscalía.
Según los testigos sobrevivientes, los soldados retiraron los elementos balísticos antes de abandonar la escena del crimen, lo que según dijo el fiscal “no ha sido corroborado”.
Mencionó que los lesionados están recibiendo apoyo por parte de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) y se hace contacto con las respectivas Embajadas para apoyarlos en lo que sea necesario.
El fiscal dijo que si se encontraban ojivas alojadas en los cuerpos de las víctimas mortales, se puede hacer cotejo con las armas que pusieron a disposición, menos, aclaró, del arma que se llevó el militar desertor. Las ojivas seguían bajo análisis pericial hasta el cierre de esta edición.
Agregó que una vez que concluyan con las declaraciones de las cuatro personas lesionadas –dos de las cuales fueron dadas de alta ayer a las 09:00 horas del Hospital General–, así como de los militares presentados a declarar, y que finalicen los análisis balísticos, la carpeta de investigación será declinada a la FGR.
Tras practicarles la necropsia de ley a los cadáveres de los dos extranjeros, médicos forenses lograron extraer varias ojivas que permitirán la confronta con las cuatro armas largas de los soldados que estaban en el lugar de los hechos y que entregó la Guarnición Militar para la realización de los análisis de balística forense.
El fiscal Salas dijo que la Sedena puso a disposición del Ministerio Público, adscrito a la Unidad de Investigación de Delitos contra la Vida, a cuatro soldados, mientras que uno desertó y se llevó su arma de cargo. Los elementos rindieron su declaración en calidad de presentados, sin que fueran detenidos, agregó el fiscal.
Supuestamente los militares buscan al elemento evadido.
Ayer por la tarde los agentes investigadores cuestionaron la actuación de los mandos castrenses, ya que los hechos ocurrieron a las 6 de la tarde del lunes y 18 horas después entregaron el armamento.
El fiscal Salas dijo que la carpeta de investigación será declinada a la Fiscalía General de la República (FGR) por ser hechos de competencia federal.
Arena dificulta rescate de cuerpos
La zona limítrofe entre Chihuahua y Nuevo México es uno de los puntos más utilizados para el cruce indocumentado de personas en situación de movilidad, explicó el fiscal de Distrito Norte.
Se trata de un área desértica por la que los extranjeros deben caminar varios kilómetros para llegar a la valla de seguridad que edificó el Gobierno de Estados Unidos para proteger su frontera.
Los sobrevivientes al hecho violento llevaban los pies cubiertos con una especie de esponja o hule espuma sobre el calzado, a fin de facilitar su camino entre los arenales del inhóspito lugar, donde el clima era frío.
“El conductor huyó con cuatro mujeres que no resultaron lesionadas, no tenemos noticias de ellos, tenemos el vehículo en el que viajaban los lesionados, que quedó atascado entre los montículos de arena. Por las condiciones del terreno también el levantamiento de los cuerpos y su traslado al Servicio Médico Forense se complicó pues la unidad también se quedó varada en la arena”, dijo.
Militares tratan de ingresar al HG
Después de que paramédicos de los cuerpos de emergencia notificaron al Hospital General que llevaban a cuatro personas lesionadas por proyectil de arma de fuego, personal castrense trató de ingresar a la institución para interrogar a los lesionados, lo que fue impedido por la subdirectora, Beatriz Iliana Pérez Martínez, quien instruyó al personal a dar primero la atención médica a los heridos.
“Llegaron cuatro personas, las cuatro fueron heridas por proyectil de arma de fuego. Una de ellas está hospitalizada, tiene una fractura de la tibia izquierda y el resto de sus compañeros, tenían heridas por proyectil en sus piernas, pero eran heridas mínimas, estuvieron en observación en el área de Urgencias y fueron dados de alta a las 09:30 horas”, dijo.
Explicó que el personal de Trabajo Social hizo un llamado al Ministerio Público y al Instituto Nacional de Migración (INM).
Mencionó que los lesionados hicieron señalamientos al personal de que las personas que los balearon tripulaban unidades vehiculares en color arena y eran soldados.
Frente al HG se observó que la unidad 0909310 carecía de matrículas de circulación, pese a ser vehículo oficial de la Sedena. Esta misma patrulla militar se observó en el exterior de la Fiscalía de Distrito.
Con información de: eldiariodechihuahua.com