CALIBRE POLÍTICO… COLUMNA
POLÉMICAS. – Las recientes polémicas en las que se ha visto envuelta Presidencia Municipal, tanto por Seguridad Pública, como por la pavimentación del Periférico, no fueron aprovechadas por la oposición, a pesar de haber tenido en sus manos un par de oportunidades únicas para haber lanzado toda la artillería contra el alcalde y lo que representa, es decir, Movimiento Ciudadano.
DESDIBUJADOS. – Si usted cree que a César Peña le fue mal, le tenemos noticias: le pudo haber ido peor si el Frente Amplio Por México estuviera realmente coordinado y hubiese realizado una seguidilla de declaraciones contundentes, pero están desdibujados, desorganizados y perdidos. No hay una figura líder, ni en el PRI ni en el PAN, que sea punta de lanza para este diseñar estrategias. Imagínese si así van a la contienda electoral, el resultado, con todo y lo que digan las encuestas, podría anticiparse con olor a (otra) derrota.
DIPUTADA. – ¿Dónde está, por ejemplo, la diputada Ángeles Gutiérrez, quien ni por asomo vertió algún posicionamiento, ni respecto a las patrullas, ni a los policías, ni a la deficiente obra del perisur? La respuesta, dicha por ella misma entre sus cercanos, es que no le gusta meterse en problemas, lo que estaría bien si no fuera por el simple y sencillo detalle de que es la legisladora federal. ¡Y así quiere repetir en la curul otros tres años! ¡Hasta alcaldesa quería ser!
PIÑÓN. – El único que le entró al tema y hasta el fondo fue, otra vez, Edgar Piñón, quien acusó al Gobierno Municipal con la Auditoría Superior del Estado y con la Secretaría de la Función Pública, aunque no ha servido de mucho en el pasado, pero a ver ahora, ante tanta evidencia. Aún así, hay un respaldo mediocre del partido hacia su máximo representante. Los temas daban para que Alejandro Domínguez hiciera ruido a nivel estatal. Ahora hasta Dalila Villalobos se la llevó leve, cansada tal vez de que nunca la respalden y de ser la única que alza la voz.
TIBIOS. – ¿Y Chava Calderón? Si busca ser alcalde está muy tibio. Pero la oposición no es únicamente el PRIAN, también hay otros actores que nadan de muertito cuando se trata de tomar al toro por los cuernos, como Otto Valles, que pudo haber aprovechado los reflectores con declaraciones fuertes. Ni Pedro Villalobos apareció. Así que, como lo dijimos más arriba, si Usted cree que a César Peña le fue mal, realmente apenas si sufrió un par de raspaduras, porque los opositores no tienen ni pies ni cabeza, y pudieron haberlo apaleado.
PRI. – En otros temas, es en el Revolucionario Institucional donde no logran unir en un solo proyecto a los distintos grupos y actores. Y es que, en el caso de Amín Corral, es hora que no han visto la superestructura que presumió, y en cuanto a la red de afiliados que prometió, cabían en dos carpetas de esas amarillas, tamaño carta, misma que presentaron a destiempo y en Chihuahua, desde donde Alex Domínguez los devolvió indicándoles que eso se veía primero con Avril Carmona, pero que, además, ya andaban en tiempos extras. Por si hubiese algo que agregar, nos cuentan que tanto Amín como los que le acompañan, se han mostrado un poco desilusionados porque pensaron que llegarían a hacerse de aquel centenar de presidentas seccionales que movían masas y otro tanto de coordinadores de zona, de los que apenas si queda una veintena.
MIGUEL. – Lo que habría que reconocérsele a Amín es que, al menos, tiene la intención, aunque no haya cómo, de trabajar de la mano, a diferencia de Miguel Jurado Prieto, quien instruyó a su gente, los mismos de la campaña pasada, que no hicieran equipo con los del PRI, porque él podía solo. Es decir, piensa jugarla igual que la vez pasada y con los mismos operadores ¿y qué tal le fue con eso?
INFLUYENTISMO. – Ya no sorprenden los alcances de la Dirección de Seguridad Pública de Parral, por eso ya no suena a escándalo que el tío de la encargada de fiscalizar al Municipio, de nombre Evaristo Portillo Mares, haya sido liberado tras protagonizar un choque-atropello que derivó en la muerte de un humilde ciclista, con independencia de quien haya tenido la culpa, lo que se deslinda tras una investigación cuando hay un fallecido, no de inmediato como sucedió, gracias al influyentismo del que se hizo gala en el incidente automovilístico.
CONFESIONES. – Y es que fueron los mismos agentes los que confesaron que otros de los elementos en turno, tuvieron que liberar al privilegiado conductor, cuyo apellido lo salvó, al menos ese día, pero de eso no hay denuncia de la funcionaria. Si el tráfico de influencias no es corrupción, entonces no sabemos lo que es.
GÉNERO I. – Para concluir con esta columna, dedicaremos un par de espacios a explicar que la violencia política contra las mujeres, es decir, en razón de género, comprende todas aquellas acciones u omisiones de personas, servidoras o servidores públicos que se dirigen a una mujer por ser mujer y tienen un impacto diferenciado en ellas o les afectan desproporcionadamente, con el objeto o resultado de menoscabar o anular sus derechos político-electorales, incluyendo el ejercicio del cargo. La violencia política contra las mujeres puede incluir, entre otras, violencia física, psicológica, simbólica, sexual, patrimonial, económica o feminicida.
GÉNERO II. – Lo que no podría constituir violencia política por razones de género, y no lo decimos nosotros, sino la ley como tal, son las críticas a su desempeño como servidora pública, incluso empleando calificativos como deshonesta y corrupta, en caso de que aplique; o descalificaciones respecto de sus competencias laborales, por ejemplo, si hizo uso de su poder para beneficiar a sus familiares en alguna presunta comisión de delito; o si compite contra un hombre para ocupar un cargo de elección y se elige a él en lugar de ella, entre otros. De ahí a que se opte por la victimización para evitar ser cuestionada por su actuación, es otra cosa. Póngale nombre y apellido, pero aplica por igual a alcaldesas, diputadas, regidoras, y sí, también a fiscalizadoras.