Narcos fingen ser náufragos: SEMAR; usan la ley para evadir la cárcel
Diversas organizaciones criminales, como los cárteles del Pacífico, Beltrán Leyva, Golfo y Juárez utilizaron desde los años 80 diversas rutas aéreas y terrestres para el trasiego de cocaína de Colombia a México con destino a Estados Unidos.
Sin embargo, el traslado de estupefacientes de Colombia y Ecuador con destino a México sufrieron modificaciones con los constantes operativos que realizan las Fuerzas Armadas desde el inicio de la llamada guerra contra el crimen organizado iniciada en diciembre de 2006.
Entre de las modificaciones que utilizan las organizaciones criminales están la utilización de rutas marítimas, la asesoría de agrupaciones de derechos humanos y la utilización de geolocalizadores en los paquetes de droga para que sean ubicados de inmediato en mar abierto, el uso de torpedos dirigidos llenos de cocaína, aviones ligeros o lanchas rápidas para el trasiego de cocaína.
Ante esto la Marina-Armada de México (Semar) puso mayor énfasis en tener lo último en tecnología de punta en radares, cámaras nocturnas, helicópteros, lanchas y drones, lo que se traduce en importantes golpes al crimen organizado principalmente al Cártel del Pacífico, quien utiliza cinco rutas marítimas para el trasiego de cocaína de Sudamérica a México.
De acuerdo con el titular de las Operaciones Navales de la Secretaría de Marina-Armada de México, que no revelaremos su identidad por temor a represalias del crimen organizado, en el traslado de estupefacientes se utilizan diversas embarcaciones en los litorales mexicanos.
“Existen en algunos viajes que hacen en aeronaves pequeñas que navegan sobre el mar y también lanzan al mar determinadas cargas, las cuales quedan balizadas para que vayan otros buques o embarcaciones menores para recogerlas”, dijo.
Esto se debe a que los integrantes de las organizaciones criminales, asesorados por instancias de derechos humanos, les han recomendado tirar la droga al mar, incendiar sus lanchas o tirarse al océano al ser sorprendidos por las autoridades, con la finalidad de cambiar su estatus de presuntos delincuentes a náufragos, como lo refiere el titular de Operaciones Navales de Semar.
Utilizando algunas leyes como Ley Orgánica de la Marina-Armada de México, en su Capítulo Primero inciso V. señala que se debe “Salvaguardar la vida humana en la mar y en las aguas interiores, mediante operaciones de búsqueda, rescate y salvamento en las aguas marinas nacionales e internacionales y en todas aquellas en las que el Mando Supremo lo ordene”.
Por su parte, la Ley de Navegación y Comercio Marítimos reformada en 2016 en su Capítulo Dos, inciso IX. Obliga a las autoridades marítimas “a participar con la Semar en la seguridad de la navegación y salvaguarda de la vida humana en el mar”.
“Una de las funciones fundamentales de la Armada es la salvaguarda de la vida humana en la mar, por lo tanto, los tenemos que rescatar, ante esto la evidencia puede perderse o si se logra recuperar todo esto se pone a disposición de las autoridades ”, aseguró el mando naval.
Otro de los problemas que han tenido en los aseguramientos de estupefacientes en altamar es instalar una cadena de custodia como lo exige el nuevo Sistema Penal Acusatorio para preservar la evidencia, el problema se basa en el oleaje y viento, señaló el titular de las Operaciones Navales.
“Sin embargo, estas personas que hacen el tráfico tienen toda una estrategia para responder a este tipo de eventos”, añadió.
Para evitar que se siga cambiando el estatus de los presuntos delincuentes rescatados en altamar, la Secretaría de Marina prepara una propuesta de adiciones al nuevo Sistema de Justicia Penal que no contempla ningún artículo en océanos mexicanos.
Con información de: excélsior.com