Crece la lista de casos sin resolver en el estado
FGE no ha logrado detener a responsables de desapariciones, asesinatos y secuestros.
Desapariciones, asesinatos y secuestros en la región sur de Chihuahua se suman a la lista de casos aún sin resolver por la Fiscalía General del Estado (FGE).
Tan sólo ayer se dio a conocer el hallazgo de cuatro cuerpos sin vida que corresponden a los policías municipales de San Francisco de Conchos, que fueron secuestrados el pasado domingo en los alrededores del seccional de La Boquilla.
Tras la desaparición forzada de los agentes municipales, el lunes pasado se desplegó un operativo de agentes estatales y miembros de la Guardia Nacional para dar con la ubicación de los hombres, identificados como Gustavo Ramírez Jiménez, Ángel Carrillo Rey, Salvador Omar Araiza Lozoya y Ramón Horacio Galindo Castrellón.
A este caso se suman una serie de conflictos en aquella región que han quedado impunes hasta la fecha.
Uno de los hechos más importantes fue el secuestro el 28 de mayo de 2018 de Oswaldo Galván, Mayra Mendoza y Sigrid Díaz, enfermeros que laboraban en Parral, el cual sigue sin ser resuelto a cabalidad.
La FGE logró la detención el abril pasado de Omar Iván R.J., expolicía municipal de Parral, quien fue acusado de presuntamente participar en dicho secuestro, pero las investigaciones no han arrojado pistas que den con el paradero de los jóvenes.
Los tres enfermeros son originarios de Jiménez y prestaban su servicio social en el Hospital de Ginecoobstetricia de Parral, mientras que otra de las víctimas desaparecidas, Merari Muñoz, de 18 años, es originaria de Chihuahua y madre de un bebé.
Sigrid y Oswaldo fueron vistos por última vez la madrugada del lunes 28 de mayo, después de concluir su turno en la clínica. Horas antes, otra de las enfermeras, Mayra Mendoza, de 21 años, y Merari, ambas amigas, desaparecieron cuando presuntamente se vieron para acudir a un festejo.
El 29 de septiembre de 2018, Claudia Palmira M. A., alias “La Pammy”, fue detenida en Parral por presuntos casos de explotación sexual. Las investigaciones de la FGE ligaban esa actividad delictiva al caso de los enfermeros.
Luego de su vinculación a proceso en octubre de ese año, medios de comunicación publicaron imágenes filtradas de un supuesto catálogo de mujeres a cargo de “La Pammy”. En las imágenes aparecían fotografías de Mayra y Merari.
El 23 de septiembre de 2018, fue asesinado Uriel Ulberto Loya Deister, líder de la Coparmex en Parral. Loya Deister fue atacado la tarde de un domingo en el estacionamiento de un restaurante de mariscos. Desde entonces, la FGE no ha logrado la captura de ningún probable responsable de su homicidio.
En abril pasado, el gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, refrendo su compromiso de esclarecer el homicidio de Uriel Loya durante la Asamblea Anual ordinaria de Coparmex Parral. Sin embargo, el caso continúa sin ser esclarecido.
A esto se suma la masacre de seis hombres el 27 de mayo pasado, presuntamente miembros del crimen organizado, quienes fueron secuestrados en Parral y en otros poblados cercanos días antes de ser encontrados sin vida en San José del Sitio, localizado en el municipio de Satevó.
Los cuerpos de las seis víctimas fueron abandonados en una brecha.
Sus cadáveres presentaban lesiones similares a las provocadas en ejecuciones al estilo del crimen organizado, ya que tenían impactos de bala en la cabeza, tórax, pies y brazos.
César Augusto Peniche, fiscal general del Estado, dio a conocer que las primeras investigaciones en torno al hallazgo de los presuntos sicarios apuntan a que fue cometido por el grupo del ‘Cártel de Sinaloa’.
Desde el hallazgo de los cadáveres, la FGE no ha logrado la detención de los probables responsables del multihomicidio. Otro caso reciente ocurrió el 14 de julio en Delicias, cuando el empresario Carlos Cuevas Abundis fue víctima de un intento de secuestro que sufrió durante esa mañana en el restaurante Celebridades.
El empresario compartió en redes sociales que uno de los secuestradores fue abatido, pero uno de sus escoltas murió en el enfrentamiento.
“[Resultó] ser un comando armado de la Ciudad de Gómez Palacio, Durango”. Pese al hecho, las autoridades del estado grande no han detenido a los culpables del delito por secuestro.
Con información de: eldiariodechihuahua.com