Violaba a su hija y lo grababa en su celular; lo pierde y mujer descubre las imágenes
Un guardia de seguridad identificado como Donacio “M” de 35 años de edad, fue detenido por abusar sexualmente de su hija en un domicilio de la colonia Valle de San Lorenzo, alcaldía Iztapalapa, informó Excélsior.
Elementos de la Policía de Investigación fueron alertados luego de que una mujer hallara un celular tirado en la calle y descubriera las imágenes que el agresor grababa cuando atacaba a la niña.
De acuerdo con la carpeta de investigación CI-FDS/FDS-1/UI-FDS-1.03/0003/01-2020 de la Fiscalía para Delitos Sexuales de la Ciudad de México, el aparato fue encontrado desde el 6 de enero en calles de la colonia El Vergel.
La mujer encendió el celular y lo tuvo durante cinco días hasta que se dio cuenta que en una de las carpetas en la memoria había una serie de videos.
En ellos se apreciaba a un hombre mayor de edad atacando sexualmente a una niña.
La mujer decidió entregar el celular a personal de la Fiscalía General de Justicia capitalina, donde un grupo de agentes de la Policía de Investigación (PDI) comenzó a trabajar en el caso.
En las indagaciones intervino el equipo de análisis cibernético y de análisis forense. Solicitaron la autorización de un juez para poder hacer la extracción de datos y se dedicaron a buscar pistas.
Luego de semanas de análisis, los investigadores pudieron extraer la información necesaria para ubicar al hombre en la colonia Valle de San Lorenzo.
Con distintos aparatos y con trabajo de campo, los investigadores finalmente hallaron hace unos días la casa donde aparentemente eran grabados los videos y se dedicaron a vigilar el domicilio durante algunos días.
Supieron que se trataba de un guardia de seguridad de 35 años de edad, que se llama Donacio “M” y que la pequeña de los videos, era su hija.
Este jueves, agentes de la Policía de Investigación (PDI) rescataron a la menor de edad y a un hermano.
Al mismo tiempo, el Ministerio Público obtuvo una orden de cateo y una aprehensión en contra de su padre.
Al revisar la casa encontraron tres teléfonos celulares, una memoria USB y una tableta electrónica, para su análisis. Además, investigan a la madre de los niños para saber si tenía conocimiento de las agresiones.