“Demostraré que no soy culpable”, dice Lozoya ante imputaciones de lavado de dinero
En su primera audiencia ante el juez, Emilio Lozoya se declaró inocente del delito de lavado de dinero y de recibir presuntos sobornos por 3.4 millones de dólares de la empresa Altos Hornos cuando era director de Pemex.
“Demostraré que no soy responsable ni culpable de los delitos que se me imputan”, dijo Lozoya al juez luego de que los fiscales de la FGR detallaran cómo se triangularon recursos de la empresa Altos Hornos a favor de Lozoya y su hermana Gilda.
Lozoya denunció ante el juez que ha sido “sistemáticamente intimidado, presionado, instrumentalizado”. Agregó que denunciará y señalará a los autores de esos hechos, además reiteró su deseo de colaborar con las autoridades.
La Fiscalía General de la República (FGR) solicitó la vinculación a proceso para Lozoya Austin por el delito de lavado de dinero.
En su imputación, los fiscales señalaron que el exdirector de Pemex recibió 34 millones de pesos producto del presunto soborno de Altos Hornos con los cuales compró una residencia. En retribución a eso Lozoya promovió que Pemex le comprara a Altos Hornos la empresa de fertilizantes Agronitrogenados, que estaba declarada como chatarra.
“Usted alentó una actividad ilícita”, dijeron los fiscales a Lozoya al detallar cómo desde la dirección de Pemex avaló la compra de Agronitrogenados, lo cual generó pérdidas en Pemex.
Tras el detalle del presunto delito, los fiscales concluyeron la imputación a Lozoya y señalándolo como presunto responsable del delito de lavado de dinero.
En el caso de los presuntos sobornos también están implicados Gilda Susana Lozoya Austin, hermana de Emilio y el empresario Alonso Ancira Elizondo titular de Altos Hornos de México.
Al inicio de la audiencia, el juez que lleva la causa es José Artemio Zúñiga Mendoza, del Reclusorio Norte, consideró que se cumplió correctamente con la orden de aprehensión contra Lozoya a su llegada a México y se procede a la imputación, es decir, explicar al juez y al acusado por qué fue detenido y extraditado.
También se expusieron los problemas de salud que presenta Lozoya. De acuerdo con la FGR, consistió en una anemia de 5 días y dolores de esófago que se confirmaron desde España. Esta fue la razón del retraso de la audiencia y por la que hoy no fue trasladado a un reclusorio.
En la audiencia que se realiza por videollamada se encuentran Lozoya (desde el hospital) y sus abogados, Miguel Ontiveros Alonso y Alejandro Rojas Pomeda; por la contraparte los fiscales de FGR, representantes de Pemex y de la Unidad de Inteligencia Financiera.
El miércoles la audiencia será por el caso Odebrecht, ante el Juez Federal de Control del Reclusorio Norte, Juan Carlos Ramirez Benítez.
Ambas audiencias serán desahogadas a través del sistema de video conferencia, “dadas las condiciones de salud del imputado” y la pandemia de COVID-19.
No habrá acceso al público y el seguimiento de la audiencia para la prensa será por medio de notificaciones enviadas vía WhatsApp.
Lozoya aceptó ser extraditado a México con la promesa de colaborar con las autoridades mexicanas para evidenciar una presunta red de corrupción a nivel federal en el sexenio pasado.
De ese modo podría obtener beneficios que van desde un juicio corto y una pena reducida, o incluso una libertad anticipada.
Con información de: animalpolitico.com