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Un niño kamikaze mata a 51 personas en una boda turca
Posted On 22 Ago 2016
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69 personas siguen hospitalizadas, 17 en estado crítico. Hasta la fecha no se habían utilizado menores kamikazes en atentados en ese país.
Al menos 51 personas que asistían a una boda en el sur de Turquía murieron en un atentado cometido por un niño de entre 12 y 14 años, un kamikaze “probablemente” yihadista, anunció ayer el presidente turco.
“El atentado de Gaziantep es obra de un kamikaze de entre 12 y 14 años que se hizo estallar, o bien llevaba explosivos detonados a distancia”, declaró el presidente Recep Tayyip Erdogan.
En rueda de prensa en Estambul, el presidente explicó que sospechaba del grupo Estado Islámico (EI) como autor del ataque. A la boda asistían muchos kurdos, la etnia cuyas milicias protagonizan una encarnizada lucha en el norte de Siria y en Irak contra el yihadismo.
Erdogan afirmó que 69 personas siguen hospitalizadas, entre ellas 17 en estado crítico. Hasta la fecha no se habían utilizado menores kamikazes en atentados en Turquía, un país que desde hace un año sufre ataques tanto del EI como de los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), sobre todo en Ankara y Estambul.
“Venga de donde venga el terror, eso no cambia nada para nosotros”, declaró Erdogan. “Como nación, usaremos toda nuestra fuerza, unidos, de la mano, para luchar contra el terrorismo como hicimos el 15 de julio”, añadió refiriéndose al golpe de Estado fallido.
Un responsable turco declaró que la ceremonia se celebraba al aire libre en un barrio de Gaziantep. Los novios sobrevivieron a la matanza. La novia Besna Akdogan está muy conmocionada y se desmayó varias veces.
“Han convertido mi boda en un baño de sangre”, declaró a la agencia de prensa Anadolu. Resultó herida leve y fue dada de alta este domingo.
La agencia Dogan afirmó que el suicida se mezcló con los invitados, entre los que había muchas mujeres y niños, y detonó la carga explosiva.
Las fuerzas de seguridad buscan a dos personas que lo acompañaban y que huyeron tras el ataque.
Los testigos describen una escena dantesca. “Cuando llegamos había una veintena de muertos, cuerpos con la cabeza, el brazo o la mano desperdigados por el suelo”, contó un hombre.
Gulser Ates, una herida, contó a Hurriyet que el ataque se produjo cuando terminaba la fiesta. “Estábamos sentados en las sillas, yo estaba charlando con un vecino. Murió, se desplomó delante de mí durante la explosión. Si no hubiera caído sobre mí, yo también habría muerto”, dijo.
Un diputado kurdo, Mahmut Togrul, aseguró que “el objetivo era atacar una boda kurda”.
Un total de 37 cuerpos fueron enterrados ayer, y en el funeral se vivieron escenas de gran emoción y cólera.
Un grupo de familiares lanzó botellas contra la policía, mientras proferían acusaciones contra Erdogan. En el lugar de la explosión numerosos edificios aparecían con las ventanas reventadas, y en el suelo había zapatos desperdigados.
Ataúdes en hileras
El sureste y el este de Turquía fueron blanco esta semana de tres atentados que dejaron 14 muertos. El gobierno los atribuyó al PKK kurdo.
La guerrilla kurda, después de una calma relativa tras la intentona golpista del 15 de julio en Turquía, parece haber reanudado una intensa campaña de atentados contra las fuerzas de seguridad. Gaziantep se ha convertido en un punto de paso de numerosos refugiados sirios que huyen de la guerra civil iniciada hace más de cinco años y medio.
Pero, además de refugiados y militantes opositores, en la región están presentes un número significativo de yihadistas.
La explosión de Gaziantep se produjo el mismo día en que el primer ministro, Binali Yildirim, anunció que Turquía quiere tener un papel “más activo” en la solución de la crisis en Siria con el fin de detener el baño de sangre.
El embajador de Estados Unidos John Bass lo condenó y añadió: “Somos solidarios con nuestro aliado Turquía y nos comprometemos a seguir trabajando estrechamente juntos para derrotar la amenaza terrorista”.
“Recemos por las víctimas, muertos y heridos, y pidamos paz para todos”, proclamó en el Vaticano el papa Francisco.
Los atentados que han golpeado a Turquía
Turquía es blanco desde el verano de 2015 de una serie de ataques mortíferos atribuidos al grupo yihadista Estado Islámico (EI) o al Partido de Trabajadores del Kurdistán (PKK).
El 28 de junio, 47 personas, incluyendo varios extranjeros, murieron en un triple atentado suicida en el aeropuerto internacional Atatürk de Estambul. Aunque el ataque no fue reivindicado, las autoridades lo atribuyen al EI.
El 7 de junio hubo 11 muertos, incluyendo seis policías, en un atentado con coche bomba contra un autobús de policías antidisturbios en Beyazit, un barrio histórico de Estambul. El ataque fue reivindicado por los Halcones de la Libertad del Kurdistán (TAK), un grupo radical cercano al PKK.
EL 19 de marzo, cuatro turistas (tres israelíes y un iraní) murieron en Estambul y 36 resultaron heridos en un atentado cometido por un kamikaze que se hizo estallar en la famosa avenida Istiklal. Las autoridades acusaron del ataque al EI.
El 13 de marzo, 35 personas murieron y más de 120 quedaron heridas en un atentado con coche bomba en el centro de Ankara, reivindicado por los TAK.
El 17 de febrero se registraron 28 muertos y unos 80 heridos en la explosión de un coche bomba conducido por un kamikaze en pleno corazón de Ankara. El ataque, que tenía como blanco vehículos militares, fue reivindicado por los TAK
Y el 12 de enero 12 turistas alemanes murieron en un ataque suicida en Sultanhamet, en el corazón histórico de Estambul.
El atentado , del que las autoridades acusaron al EI, tuvo lugar en el antiguo hipódromo cerca de la basílica Santa Sofía y la Mezquita Azul, lugares muy turísticos de la ciudad más grande del país.
Con información de: paginasiete.bo