Trump enfrenta demanda por calificar al Covid-19 como “virus chino”
El ex presidente estadunidense Donald Trump fue demandado por una organización de derechos civiles por llamar al Covid-19 el “virus chino”.
La denuncia, presentada en un tribunal federal de Nueva York por la Coalición de Derechos Civiles Chino-Estadounidenses (CACRC, siglas en inglés), alega que el uso por parte de Trump de esa frase y otros insultos racistas similares carece de fundamento, ya que aún no se ha determinado el origen del nuevo coronavirus, y que la conducta del expresidente perjudicó a la comunidad chino-estadunidense.
Trump mantuvo durante toda la pandemia “una actitud extrema e indignante, sin tener en cuenta si tal conducta causaría que los estadounidenses de origen chino sufrieran cierta angustia emocional”, reza la demanda con fecha del 20 de mayo.
La pandemia de coronavirus ha provocado un aumento de la violencia contra los estadounidenses de origen asiático, cuya gran parte es de ascendencia china, que los activistas han atribuido a la retórica de Trump.
La demanda alega además que Trump continuó usando dichas palabras despectivas para referirse al coronavirus incluso cuando sabía que el agente infeccioso no provenía necesariamente de China.
“La verdad importa, las palabras tienen consecuencias, especialmente para quienes ostentan posiciones de poder o influyentes”, argumenta la acusación y continúa: “Trump repitió intencionalmente esas palabras difamatorias para servir a sus propios intereses personales y políticos con un asombroso nivel de malicia y negligencia, y por lo tanto hirió gravemente a las comunidades chino/asiático-estadunidenses”.
La CACRC está pidiendo que se pague 1 dólar estadounidense a cada asiático-estadounidense e isleño del Pacífico que viva en Estados Unidos como disculpa, lo que sumaría 22,9 millones de dólares.
Los demandantes dijeron que usarían el dinero para establecer un museo que exhibirá la historia de las comunidades asiático-estadounidenses y de las islas del Pacífico junto con su contribución a Estados Unidos.
Fuente: La Jornada