CALIBRE POLÍTICO… COLUMNA

MORENA. – Martín Chaparro, actual dirigente de Morena en el Estado, cometió el enorme pecado de reconocer el triunfo de Maru Campos, mientras su propio candidato a gobernador, Juan Carlos Loera, anunciaba la impugnación de la elección, por lo que será el primer sacrificado en los movimientos al interior del partido guinda.

RENOVACIÓN. – Bueno, es que también le ha venido jugando al vivo desde hace tiempo. Basta recordar que se les atravesó a Loera y a Pérez Cuellar al registrarse como aspirante a la precandidatura a la gubernatura. Tarde o temprano la iba a pagar, además ya lleva 7 años al frente. Es hora de una renovación.

RIGGS. – En Movimiento Ciudadano también hay manos levantadas para suceder a Francisco Sánchez en la dirigencia estatal, con independencia de que llegue o no al Congreso del Estado. La jugada podría ir por el rumbo de que la pareja conformada por Miguel Riggs y Ana Lucía Baduy, se hagan del poder en el partido naranja: el candidato perdedor a la alcaldía se quede como presidente de MC, y la ex reina de belleza con la diputación local plurinominal, esto último por razones de género, lo que terminaría de tajo con el proyecto del ex secretario del Ayuntamiento de Parral.

MANO. – La mano que mece la cuna detrás de estos movimientos naranjas, podría ser la de Javier Corral, ahora que se abrió de capa y dijo que en ese partido estaban sus simpatías. De ahí que Riggs se convierta en presidente, sino de la capital, sí de MC, con la venia de Alfredo Lozoya. Si usted gusta son meras especulaciones, pero cuando el río suena, es porque agua lleva. ¡Y en plena sequía hace más ruido!

PAN. – En Acción Nacional volvió al ruedo Jorge Puentes, quien otra vez buscará ser el presidente estatal del partido blanquiazul, tras haberse quedado en el camino contra Rocío Reza. Son limitadas las posibilidades de que Puentes llegue, por ser medio rebeldón y sincero: la suelta como la piensa. Si bien eso podría ser una virtud, en política es más un obstáculo.

PRI. – El destape de Kenya Durán para ir por la silla que ocupa Alex Domínguez es una jugada muy, pero muy obvia de Omar Bazán. Verá usted: incitará a sus incondicionales a que levanten la mano, así sean dos, tres o diez, no importa. ¿Qué obtiene Bazán a cambio? Cartas para negociar. Es la misma estrategia que utilizó Pedro Villalobos en Parral al aventar a Efraín Moriel y a Julio Yáñez el año pasado como candidatos a dirigir el Comité Directivo Municipal.

CRISIS. – A propósito, Kenya Durán fue nombrada por Omar Bazán como delegada para que viniera a operar el cambio de presidente en el PRI de Parral, o más bien a sacar a Chu Pizzas y meter a Efraín Moriel, pero no contaba con la astucia de Aguirre Silva que en ese entonces tenía muy bien aceitada la maquinaria que representan las presidentas seccionales, de tal manera que se las “cuchileó” y se armó un zafarrancho que terminó con Kenya en la cárcel por el conato de bronca en pleno boulevard.

AJEDREZ. – Si la líder de Movimiento Territorial no fue capaz de mediar una situación así en un municipio, ¿podría con los 66 restantes? La verdad no es algo que le preocupe. Kenya sabe que es una pieza más del tablero de ajedrez de Bazán Flores, a quien le tiene lealtad ciega y al momento que le instruya a bajarse de la contienda, lo hará para “declinar” por otro del mismo grupo de Omar, o bien, tirarle a la Secretaría General.

ARIEL. – Entre todos los que se barajean para sustituir a Alejandro Domínguez, la propuesta más seria es Ariel Fernández, el alcalde de Aquiles Serdán que originalmente llegó por el Partido Verde y derrotó al PRI para terminar afiliándose al tricolor en el 2017, buscar la reelección y ganar para el periodo 2018-2021. Pero además, operó la campaña de Tere Erives y logró retener la Presidencia para el PRI en la reciente elección y, por si fuera poco, pertenece al equipo de Bazán, sí, pero tampoco tiene bola incómoda con Chela ni con Alex.

AVRIL. – Con el triunfo de Edgar Piñón y la reagrupación del equipo de César Dajlala, hoy liderado por el impresentable “Cachas” Ramírez Gutiérrez, a la que perfilan como aspirante a dirigir el PRI local, es a la ex síndica Avril Carmona, que viene de ser la coordinadora de campaña de la diputación local por el Distrito 21, que aunque no gastó suela, su candidato ganó, lo que la coloca en una posición privilegiada y sin “peros” para ser la que tumbe a Rafa Álvarez, cuya Presidencia debería durar hasta el 2025, lo cual, obvio, no sucederá.

IMPUGNACIÓN. – Como se lo adelantamos en este espacio el pasado martes 22 de junio, el partido tricolor impugnó el triunfo de César Peña y el de Alma Portillo al detectar, según alegan, irregularidades en unas 50 casillas, que representan el 30% de las 168 instaladas, y a la ley electoral le basta con que se fundamenten anomalías en 33 casillas, lo que representa el 20 por ciento del total, mismas que, comprobadas, sí revierten una elección, al menos en teoría.

FUNCIONARIOS. – El recurso legal lo metió el Directivo Estatal en la persona de Alejandro Domínguez, bajo el argumento de que los funcionarios de casilla no eran todos los que estaban, ni estaban todos los que eran. La verdad de las cosas, de comprobarse las anormalidades que alega el PRI, los que quedarían muy mal serían realmente los consejeros de la Asamblea Municipal del Instituto Estatal Electoral, cuya impericia ocasionó una elección sumamente desastrosa y desaseada.

ASAMBLEA. – Basta recordar el penoso episodio del debate en el que se les salieron todos los candidatos, menos el de MC y la de Fuerza Por México, por su falta de autoridad para poner orden; o los evidentes conflictos de interés entre una de las consejeras con la moderadora del fallido debate, ex trabajadora de la AMIEE y esposa de un trabajador de Presidencia; o la renuncia de un funcionario por los malos manejos de la jefa y el despido de otra empleada por pretender hacer respetar el protocolo contra el COVID. Total, que la ineptitud estuvo a flor de piel.

PEÑA. – El que ni sufre ni se acongoja con la impugnación es César Peña, quien ya anda disfrutando del triunfo del pasado 6 de junio y ejerciendo como alcalde alterno, con el pretexto del agradecimiento a la ciudadanía, recorriendo colonias y también el sector rural, sin pisarle la manguera al todavía presidente municipal, de quien tiene la venia para actuar y hasta entregar apoyos. No pierde el tiempo para llegar calientito.

CORRAL. – El gobernador termina sus días como tal, con una patética actitud asumiendo el rol de víctima. El más reciente episodio lo protagonizaron hasta sus más allegados, en quienes, sin decir nombres, descargó sus frustraciones e indirectas cual novio adolescente a través de una publicación en redes sociales. No entiende que no entiende. No está mal que sus funcionarios expresen su apoyo a Maru Campos, pues a final de cuentas es una panista como ellos. Pero Javier Corral es de los que quiere que sus enemigos, sean los enemigos de todos y eso, simplemente no es posible.