“No se entendería la historia de México sin la figura de Don Luis H. Álvarez”: Mario Vázquez
-Enarboló una verdadera alternativa a un régimen autoritario, pero sin odio, sin violencia y sin provocar ruptura social y/o política.
-Valorado por tanto por quienes coincidían como por quienes no coincidían con sus ideas.
Como un evento histórico, así calificó el diputado Mario Vázquez coordinador del Grupo Parlamentario del PAN (GPPAN), la inscripción en letras doradas del nombre de Don Luis Héctor Álvarez en el recinto del H. Congreso del Estado.
“Sin duda uno de los chihuahuenses más insignes de la historia reciente…un hombre universal, un demócrata, luchador incansable, referente ejemplar en el servicio público, interlocutor político estimado y valorado por quienes pensaban igual que él, pero sobre todo, por quienes no coincidían con sus ideas”, apuntó Mario Vázquez.
Recordó que fue un actor del cambio político, especialmente con el ayuno de casi 40 días que protagonizó como protesta pacífica por el respeto a las elecciones del 6 de julio de 1986, manifestación con lo que ya nada en México sería igual.
“Chihuahua 86 marcó un parteaguas en la democratización del país, y el ejemplo de Don Luis despertó la admiración y el respeto de propios y ajenos. Inició así una etapa renovada de lucha por el sufragio efectivo a través de organizaciones cívicas plurales, todas compuestas en la diversidad, pero férreamente unidas en la defensa del voto”.
Destacó que su personalidad trasciende partidos por el simple peso de su virtudes ciudadanas, constituyendo una figura sin la cual no se entendería ni la historia reciente de México ni la historia del PAN, que es una historia de lucha para generar una verdadera alternativa a un régimen autoritario, pero sin odio, sin violencia y sin provocar ruptura social y/o política.
Para finalizar, agradeció a las demás fracciones parlamentarias por el apoyo a la iniciativa hecha por los diputados del PAN para el reconocimiento de este hombre, ya que exaltar y reconocer a los ciudadanos notables es un deber patriótico y definitivamente pocos hombres han mostrado tan perfecta unidad entre el pensamiento y acción como lo tuvo Don Luis H. Álvarez.