Recurren a medidas drásticas por omisiones de la JMAS
Cómo escena del crimen acordonan obras inconclusas de la dependencia
Por. Adrián Gómez
Parral.- Cuando se usa la frase “a grandes males, grandes remedios”, se hace alusión a una actitud desesperada, urgente e impostergable por resolver ciertos asuntos, más aún si se trata de aspectos que lleven de por medio la seguridad de las personas.
Ante la ineficacia de la Junta de Aguas de Parral por atender los deterioros que han efectuado en distintos puntos de la ciudad, elementos de Protección Civil realizaron el acordonamiento de los mismos con el objetivo de prevenir un accidente.
Sillones viejos, piedras y otros objetos envueltos con cinta color amarillo como en los casos de actos delincuenciales, tuvieron que ser colocados por personal de Protección Civil ante el grave padecimiento de astigmatismo y miopía que agobia a directivos y empleados de la dependencia.
En su mayoría, se trata de zanjas o registros que desde hace varios meses permanecen sin ser atendidos, y que representan riesgos para el tráfico vehicular y las personas.
La acción emprendida por los empleados municipales lleva dos objetivos, alertar de la presencia de los socavones mostrencos a las personas, y mandar un recordatorio con carácter de muy urgente a quienes debieran atender este asunto.
A su vez, el hartazgo social orilló al ayuntamiento a tomar cartas en el asunto señalizando dichos lugares, toda vez que no le corresponde efectuar las reparaciones necesarias.
De esta manera, aunque titulares vayan y vengan dentro de la dependencia estatal, queda muy en claro que falta mucha coordinación entre quienes emiten órdenes y quienes deben ejecutarlas.
Mientras tanto, la ciudad continúa a merced de quienes han hecho de la burocracia un estilo de vida cómodo, arrogante, despreocupado y continuo, cuyo asunto parece no formar parte de las prioridades en las agendas del organismo líder en quejas en la ciudad.