Duerman tranquilos, ganaron los Mineros
Ricardo Urquidi
No gana el que quiere ganar, gana el que sabe ganar…
Los Mineros le acaban de dar una lección a todo el estado, con muchas debilidades, con muchos huecos, con escaso bateo oportuno, con tan solo un abridor y un cerrador en la temporada regular, al llegar la postemporada salen los conejos de la chistera: Leonel Martínez, Emilio Guerrero, Alberto Rodríguez, Jonathan Quiñonez, Luis Jiménez, Omar Chairez, El Cano Jiménez, Víctor Hugo Chávez, Guereca mueve sus piezas con lo que tiene y Parral que llego a la postemporada vía comodín, elimina a Jiménez el líder general.
Parral Elimina a Jiménez, cuatro palabras que son cortas y no nos dan la magnitud de lo que sucedió en el 21 de Marzo, la mejor temporada de los Rojos en su Historia: 21-9, en la última serie de la temporada barre a los Mineros, los manda al comodín contra Faraones, se vuelven a enfrentar dos caras sumamente conocidas y la Furia Gris le devuelve el martillazo al mandarlos al 2018, enviando el mensaje que en todo Chihuahua no hay equipo que juegue mejor los playoffs que los Mineros.
Lo inesperado, la sorpresa son elementos esenciales para la derrota o la victoria…
En el papel, todo mundo se imaginó, incluyéndome, que el sexto era puro trámite con Aldo Salinas en el montículo, los más optimistas en la Capital del Mundo creíamos que Parral ganaba el séptimo, teniendo como ventaja a Leonel Martínez, que una semana antes había maniatado a los Rojos en 4 hits en 8 y un tercio, pasando los dos a la siguiente ronda, sin embargo aquí entra la mano de Guereca, que trae de emergente, menor por menor, a El Kini por Armendáriz con casa llena, el regiomontano tiene un descuido, un error, una confianza, sin saber que todos los menores de Parral tienen una calidad capaz de superar cualquier obstáculo.
Aldo se equivoca, al lanzar una recta sobre el centro para que el Kini la mandara atrás de la barda del jardín izquierdo, una esférica que todavía no cae, ahí se escribió la historia, el HR del Cano Jiménez fue la cereza en el pastel, vuelacercas que lo único que hizo fue evidenciar los dos errores de Zacatillo Guerrero en el sexto: en la octava con hombre en primera, 4-2, sin outs, no toca la bola y Parral hace un dobleplay salvador, en la novena al venir a batear El Cano, entra con la grúa, se arrepiente le da un bateador de más a Salinas y la bola todavía no cae.
La vida es la constante sorpresa de saber que vivimos…
En estos momentos en que escribo estas líneas, no me quiero enterar de los demás resultados, no quiero saber contra quien vamos en semifinales, solo quiero agradecer a los Mineros, porque en un mundo en que el asombro cada día se está perdiendo, en donde la conmoción de los sucesos ya no nos llama la atención, la victoria ante el líder general, el favorito, nos ha dejado con el grato sabor de la fascinación que provoca una sorpresa.
Ahora como dice una de las tantas frases célebres que inundan el béisbol de la Cuarta Zona: “Duerman tranquilos ganaron los Mineros”.